dimarts, de gener 30, 2007

CUMBRE DE AMIGOS DE LA CONSTITUCIÓN EUROPEA

Es importante que la ciudadanía tenga conocimiento de la Cumbre celebrada en Madrid del 26 de enero en apoyo al Tratado Constitucional, porque ello supone precisamente la otra cara de la moneda, la que no vemos, la que quiere avanzar en Europa, la que no ha perdido la esperanza.

De lo que sí hay conciencia es del parón producido en el proceso de ratificación del Tratado, de hecho, parece que hablamos sólo de los países “euroescépticos” o de los noes explícitos a la Constitución Europea (Francia y Holanda) y es precisamente por esto que me parece fundamental la iniciativa en positivo llevada a cabo por Luxemburgo, país fundador de la Unión y España.

En este sentido quiero hacer hincapié en dos elementos fundamentales que sitúan a España en una situación de preeminencia en el proceso de construcción:

1º que España fuera el primero de los Estados que ratificó el texto mediante referéndum.

2º que junto a Luxemburgo hemos tenido la iniciativa de aunar convicciones y de aportar a la presidencia alemana la visibilidad de la mayoría de los Estados miembros y de la disposición al trabajo en común.

Esta visibilidad de una voluntad clara por parte de 20 Estados miembros (18 que ya han ratificado el Tratado y 2 más que han querido mostrar su apoyo al mismo) en cuanto al fortalecimiento de la Unión Política de Europa me parece que supone una pieza clave en esta coyuntura actual.

La presidencia del Consejo ejercida con determinación por el gobierno alemán marca una dirección a la que esta Cumbre celebrada en Madrid contribuye: a saber, que sin Tratado no hay reconocimiento lo suficientemente preciso de los valores europeos, ni reconocimiento de la doble legitimidad Estado/Ciudadanía, ni un marco que facilite la mayor eficacia de la UE. Como decía la canciller Merkel en un artículo publicado en prensa española “Sólo unidos podemos seguir construyendo Europa”.

Este es, precisamente, el corazón de Europa en el que creemos y por el que muchos trabajamos.